Trabajamos por medio de la fe en Cristo Jesús, ya que por gracia somo salvo. Nuestra misión es muy importante, recatar las almas de las garras del Diablo. Llevamos la palabra de Dios porque ella es vida a todo el que cree. Todo hombre (y cuando hablamos de hombre decimos varon y hembra) necesita a Dios en su corazón.
Es de gran gozo y una victoria que a través de la palabra de Dios, el hombre reconozca que le hay, y se rehabilite dejando vieja y vana manera de vivir. He sido testigo como personas esclavas del vicio Dios los a libertado y ahora son fieles adoradores, dando gracia a Dios en todo.
Porque el Diablo cegando los entendimientos de muchos van en pos de la avaricia y por obtener las cosas materiales de esta vida las cuales son perecederas sean hecho esclavo del pecado. Y es tal esclavitud que hacen daño a su prójimo por sacar de ellos provecho. Estos piensan que Dios no tomará cuidado de todas esta maldad. Pues todos serán jusgados antes el trono blanco, autoridad superior y dará su pago al que malo, condenación; y al que bueno, salvación.
Pues la obra por medio de la fe completa con amor es viva y la recompensa no tardara pues Dios es justo. Aunque el hombre no es salvo por obra, sino por gracia, pues primero tiene que dar testimonio de que ha agradado a Dios, y esto por medio de Jesucristo. Porque es menester que todo hombre sea reconciliado con Dios por medio de Jesucristo, pues sino entra por la puerta quien es Jesús, no importa la obra que haga pues será vana, porque su obra no podrá darle la salvación, pues la salvación quien la da es Cristo.
Ningun creyente esta puesto para ser juez de nadie ni para condenar, pues la misión es una y verdadera llevar con amor el verdadero mensaje para que el hombre pueda reconciliarse con Dios y ganar la promesa de vida eterna.
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